Vida Extraterrestre

 

Este es un tema que para tratarlo hay que transitar por límites que rayan lo fantasioso, pero piensen en Julio Verne.

Cuando la gente común se pregunta si existe vida extraterrestre, en líneas generales las respuestas son subjetivas y con un muy bajo contenido de sustentación.

Muchos niegan dicha existencia sin saber porque la niegan.

Para interiorizarse en el tema y salir de esa subjetividad, es importante tener idea de determinadas magnitudes.

Ante todo veamos donde estamos.

Estamos en un planeta llamado Tierra, que forma parte de un sistema solar.

El sistema solar está formado por el Sol, nueve planetas y sus satélites.

Este sistema solar tiene un diámetro de 80 unidades astronómicas equivalentes a 12.000 millones de Km

Como dato una unidad astronómica es igual a la distancia que hay entre el Sol y la Tierra, es decir, 150 millones de Km.

Este sistema solar está sobre un espiral que integra una Galaxia que tiene más de 100.000 millones de estrellas, astros, soles, etc, con un diámetro de 100.000 años luz

Un año luz es la distancia que recorre la luz en un año

La luz recorre 300.000 Km en un segundo y en un año hay 31,5 millones de segundos.

Hagan la cuenta.

En el universo hay centenares de miles de millones de Galaxias.

Dentro de está inmensidad la Tierra no es nada, es un punto minúsculo.

Entonces pregunto, ¿podemos afirmar que dentro de esa inmensidad solo hay vida en la Tierra?

Parecería ser que la respuesta es, NO.

El filósofo Metrodoro en el siglo III A.C. dijo: “Considerar que la Tierra es el único mundo poblado en la infinidad del espacio es tan absurdo como asegurar que en un campo sembrado de mijo sólo germinará una semilla.”

Muchas opiniones mencionan que el medio para tener vida debe tener agua, oxígeno, carbono y un determinado rango de temperatura ambiente tal que mantenga líquida al agua, es decir que solo piensan en una vida biológicamente igual a la nuestra.

Pensemos que la vida que conocemos se desarrolló en función al medio y no al revés.

En líneas generales los seres vivientes se adaptan al medio desarrollando funciones biológicas acordes al mismo. No olvidemos que la vida se desarrolla a partir de las sustancias que abundan.

Ahora pregunto, ¿Solo puede haber vida en planetas con características similares a la Tierra?

En éste caso parecería ser que la respuesta también es, NO.

Pero, ¿es correcto pensar que en el universo solo haya una Tierra?

Resumiendo, la posibilidad de que en el universo haya otras Tierras y que haya vida biológicamente adaptada a otras condiciones, son dos fuertes posibilidades que fortifican la idea de la existencia de lo que nosotros llamaríamos “extraterrestres”.

En éste punto hay una pregunta inevitable, ¿porqué no hemos hecho contacto con los extraterrestres?

En realidad todo pasa por el desarrollo tecnológico.

De nuestro lado, el no conocer otros tipos de energía, el no saber como aprovechar la energía cósmica, el desconocer como anular la fuerza de gravedad, el no haber descubierto todavía la antimateria (perdón Mendeleiev), el seguir pensando que la velocidad de la luz no solo no se puede alcanzar con naves espaciales, sino que es el límite de velocidad máximo para que un cuerpo se traslade (perdón Einstein), no nos permite descubrir como debemos trasladarnos por semejantes distancias a velocidades acordes a las mismas y de esa manera poder explorar otras galaxias.

Veamos la situación del lado de los extraterrestres.

¿Qué grado de sociedad tienen?

¿Están en una sociedad como era la nuestra en la edad de piedra o son sociedades tecnológicamente avanzadas?

¿Han solucionado los problemas de traslación espacial?

¿Si son superiores a nosotros, para que nos querrán conocer?

Si consideramos el fenómeno OVNI, vemos que hay un 10 % de los avistamientos que no se han podido explicar, lo que indica que hay alguien que está intentando algo.

 

Ahora veamos nuestros intentos para realizar contactos:

 

Hemos enviado sondas, no sólo para obtener información sino llevando un mensaje de la Tierra a otros seres del espacio. El 3 de marzo de 1972 se efectuó el lanzamiento de la sonda dirigida a Júpiter, Pioneer 10. Fijada en su antena había una pequeña placa grabada en una plancha de aluminio anodizada con oro cuyo tamaño era de 15 por 22,5 cm.
En la plancha está grabado un mensaje en clave que fue compuesto por los astrónomos norteamericanos Carl Sagan y Frank Donald Drake. Está escrito según el código binario que usan las computadoras y localiza a la Tierra en relación a los púlsares más próximos (Los Púlsares son fuentes de ondas de radio que vibran con periodos regulares), que forzosamente constituirían “señales físicas” reconocibles para cualquier civilización tecnológicamente avanzada. Otra parte del grabado muestra las posiciones de los planetas del sistema solar, con la trayectoria del Pioneer 10 marcada entre ellos y un diagrama que muestra al Pioneer 10 y, frente a él, a escala, las representaciones de un hombre y una mujer desnudos.

Un mensaje que la humanidad envió a las estrellas fue transmitido el 16 de noviembre de 1974, por el radiotelescopio más grande del mundo, de 300 metros de diámetro, situado en Arecibo, Puerto Rico. El mensaje era una señal de tres minutos, enviada hacia un grupo de estrellas que está a 24.000 años luz de distancia. Esta transmisión demuestra la confianza que sienten los hombres de ciencia en la existencia de extraterrestres.

El disco de larga duración más extraño y quizás el más importante que se haya grabado en la Tierra, fue enviado al espacio a bordo de las dos naves Voyager lanzadas en agosto de 1977. Se trata de un disco de cobre de 30 cm de diámetro y 16 2/3 revoluciones por minuto; su duración es de 2 horas. Una selección de 116 imágenes, grabadas electrónicamente, muestran la vida en la Tierra en el siglo XX, incluyendo fotos de un feto, una madre y su hijo, una familia, gente de diferentes razas y diversas muestras de vida animal y vegetal. Varios edificios y una plataforma de lanzamiento de cohetes representan la tecnología humana. También hay saludos orales en 55 idiomas, así como sonidos: el viento, la marea, ranas, ballenas y sonidos no naturales, como el del motor de un tractor y el despegue del Saturno V.

Si bien esto lo escribí hace unos meses, en el Clarín del domingo salió un artículo titulado “Comienza la gran aventura espacial de buscar otro planeta como la Tierra”.

Se trata de la misión Kepler y rescato un párrafo de ese artículo “La misión Kepler es el primer paso comprometido en la búsqueda de vida extraterrestre”
Sigamos con lo nuestro. Lo que nosotros no sabemos es que están haciendo los extraterrestres, ¿han realizado algún intento? Pero, ¿y si una sonda espacial ya ha pasado junto a la Tierra? ¿Les interesaríamos nosotros a ellos? ¿Se molestarían en venir a visitarnos personalmente? Estamos empezando a demostrar que podemos enviar cohetes de nuestro planeta a otros mundos; también hemos mostrado una notable incapacidad para vivir en paz y resolver los problemas de nuestro planeta. Pero ahora que podemos impulsarnos junto con nuestros problemas hacia las estrellas, podríamos adquirir gran interés para los habitantes de otros mundos. Cualquier federación galáctica preocupada por su supervivencia y la paz de la Galaxia, sin duda querrá vigilarnos cuidadosamente.
En realidad, ¿no será que ya hay extraterrestres viviendo entre nosotros? Si quisiéramos estudiar una cultura primitiva, trataríamos de pasar lo más desapercibidos posible. Del mismo modo; un buen hombre de ciencia extraterrestre preferiría observarnos sin ser visto. Y si los extraterrestres quieren entendernos realmente, lo más probable es que se mezclen con nosotros. ¿Qué mejor sistema que adoptar una apariencia humana, para pasar desapercibidos? De modo, que quizás ya nos estén vigilando: quizá los extraterrestres están más cerca de lo que imaginamos.

 

Mayo, 2009

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